miércoles, 18 de septiembre de 2024

Ulises, de James Joyce. Episodio 14: Los bueyes del sol


Hora: 22:00 h. 

Escena: Hospital Nacional de Maternidad, 29-31 Holles Street, Dublín. 

Órgano: útero. 

Arte: medicina .

Color: blanco.

Símbolo: la madre.

Técnica: desarrollo embrionario. 

Correspondencias con la mitología griega por lugares o personajes:

-Trinacria [la isla del dios del sol Helios, Sicilia moderna] corresponde al hospital.

-Lampetia y Fetousa [hijas de Helios, encargado de la custodia del ganado sagrado] serían las nodrizas.

-Helios-Horne son los doctores Andrew J. Horne y Patrick J. Barry, directores del Hospital Nacional de Maternidad en Holles Street en 1904]

-Los Bueyes representan la fertilidad, matar a los bueyes un crimen y un fraude [en el sentido formal de romper un voto].


El esquema de Linati enumera como Personas adicionales: "Helios Hiperión" [Hijo y padre juntos en una línea]; Júpiter (Zeus) y Ulises. (Tomado de las anotaciones de Gifford)

 

En estructura este episodio es una serie de imitaciones de estilos de prosa presentados en secuencia cronológica desde el latín antiguo hasta la jerga inglesa e irlandesa de 1904.

 

Joyce le escribió jocosamente en una carta a Jack Bugden (20/03/1920):

 “Bloom es el espermatozoide, el hospital el útero, las enfermeras el óvulo, Stephen el embrión». La secuencia de imitaciones de textos antiguos es una metáfora sostenida del proceso de gestación.

 

Este episodio corresponde al capítulo 12 de La Odisea, en el que Eurímaco convence a sus compañeros para que maten y se coman las vacas. Las despellejan y los cueros mugen. Los condones antiguamente se hacían de cuero de buey. El  E14 trata del parto, humano y del inglés.

 

Joyce debe haber asumido que en ese proceso ontogénico (el desarrollo de un organismo  individual) recapitula la filogenia (la historia evolutiva de las especies) que él llamaba “períodos de evolución faunal en general”» (cartas 1 :140) Así, el desarrollo de la prosa embrionaria del artista recapitula la evolución del estilo de la prosa en la historia de la literatura.(Tomado de las Anotaciones de Gifford.  La traducción es mía.)

 

Anthony Burgess (ReJoyce) interpreta el uso de los estilos en este capítulo: el latín representa lo femenino y el anglosajón lo masculino.  Uno fertilizaría al otro para que el inglés como lo conocemos naciera al cabo de 900 años.

 

El escritor quebequense Victor-Lévy Beaulieu, en su obra «James Joyce, l’Irlande, le Québec, les mots», escribe sobre el E14  del Ulysses:

«en los bueyes del sol la idea era el crimen cometido contra la fecundidad esterilizando el acto del coito».

 

El dilema entre parto y contracepción se presenta por primera vez en el episodio desde la frase:

“preservative had given them a stout Shield of oxengut”

 

García Tortosa en su traducción del E14 hizo el recorrido estilístico en el idioma español. Me parece una decisión interesante, pero prácticamente lo tuvo que reescribir.

  

En el prólogo de su traducción, Francisco García Tortosa nos habla de la metempsicosis de Bloom y Stephen, cuyos nombres cambian cuando cambia el estilo, se van reencarnando de época en época. Lo mismo sucede con el lugar y los objetos, y más tarde sucederá con ALP y HCE en el Finnegans Wake.

 

Desglose por estilos (tomado de las anotaciones de Gifford a menos que se indique lo contrario)


El inicio del capítulo son tres conjuros repetidos tres veces al estilo de los Fratres Arvales, según Stuart Gilbert (James Joyce’s Ulysses, NY 1952, pág 296).

 

«Los Cantos Arvales o Carmen Arvalium eran himnos de carácter religioso, entonados por los Fratres Arvales, sacerdotes consagrados a la diosa Dea Dia (Ceres), durante la procesión de la luna llena de mayo. Estaban realizados en un tipo de verso llamado saturnio(…)» (Tomado de https://t.co/EgQiGBAQol )

 

Una parte de sus ceremonias era el Himno Arvalo. En el Himno Arvalo (c 218 AC, descubierto en el s. XIX) cada una de las primeras cinco líneas era repetida tres veces. El Hurra final (en Joyce Hoopsa) se repetía seis veces.

 

El párrafo es una imitación de los estilos de prosa latina de los historiadores romanos Salustio (86-34 AC) y Tácito (1555-120 AC). La manera en que está escrito sugiere una traducción literal, sin anglización del uso de la palabra y sintaxis (Gifford). Lo mismo se puede decir del estilo siguiente, usado sin anglización, de «It is not why therefore» hasta «had begun she felt», escrito en el estilo de las crónicas latinas. Esos dos párrafos son una traducción literal sin adaptación al inglés.

  

De «Before born baby had» hasta “sorrowing one with other” imita el estilo de prosa rítmica aliterativa anglosajona, estilo asociado con Aelfric (c. 955-1022), escritor líder de este período. En sus efectos estilísticos Aelfric seguía la moda de la época, la cual provenía de la prosa latina del siglo X. La aliteración se asociaba también con la poesía anglosajona, en la cual era el efecto sonoro dominante.

En la línea “Some man that wayfaring was” comienza el primer mes de gestación. Desde ésta línea hasta el final del episodio en el estilo de Aelfric, el fragmento es un eco del lamento elegíaco anglosajón “The Wanderer”, preservado en el libro de Exeter.

De “Therefore,everyman” hasta »”her childless”: prosa en inglés medieval. El primer párrafo abre el discurso moralista medieval “Everyman” (c 1485).

De “And whiles they spake” a “Thanked be Almighty God” imita la obra “Travels of Sir John Mandeville” (c 1336-71), una compilación de historias fantásticas medievales de viaje, aparentemente escritas en Liège, Bélgica, por un tal John Burgundy o John de la Barba.

 

This mean- while this good... murdered his goods with whores - Imita la prosa del siglo XV de Sir Thomas Malory (muerto en 1471) específicamente su compilación de leyendas sobre el príncipe Arturo, Morte d'Arthur (impresas en 1485).

 

the unicorn how once . . . cometh by his horn - El origen de este particular fragmento de bestiología medieval es oscuro, pero puede ser el resultado de una (ebria) confusión de la leyenda del unicornio con la del fénix. En algunos bestiarios medievales se dice que el unicornio vive mil años; esta numerología vincula al unicornio con Cristo y con la creencia en ciclos de regeneración de mil años. El fénix, el pájaro mítico que una vez cada milenio era consumido por el fuego y renacía de sus propias cenizas, también es un emblema de Cristo en los bestiarios medievales.

  

De « About a present time » a « rest should reign » imita el estilo de la prosa de las crónicas isabelinas.


De “To be short this passage” a “of a natural phenomenon”, mezcla compuesta de estilos de prosa latinados de finales de los ss. XVI-XVII que incluyen los de John Milton (1608-74), Richard Hooker (1554-1600), Sir Thomas Browne (1605-82) y Jeremy Taylor (1613-67).

So Thursday sixteenth... queerities no telling how - inspirado en el estilo de los escritores de diarios del siglo XVII (quienes eran amigos) John Evelyn (1620-1706) y  Samuel Pepys (1063-703). Más bien está inspirado en lo que Joyce pensaba que era el estilo de Pepys, pues estaba trabajando con una edición muy editada, según el ensayo crítico de J. S. Atherton.

With this came up... sent the ale purling about - en el estilo del periodista, panfletista y novelista inglés  Daniel Defoe (circa 1661-1731).

De But was young Boasthard’s…bring breanningly biddeth: imitación del estilo de John Bunyan (1628-88), un predicador radical inglés, en cuyas alegorías, especialmente «Pilgrim’s Progress» (1675) hace extenso uso de nombres personales como “Boasthard” y “Calmer”.

 

An Irish bull in an ... A man's a man for a' that - En el estilo de Jonathan Swift (1667-1745), particularmente en Un cuento de un rey (1704), Parte IV, en la que Swift satiriza el uso que hace Pedro (alegóricamente, la Iglesia Católica Romana) de las "bulas papales", en una provocativa parodia de la Iglesia y su historia.

Our worthy acquaintance... larum in the antechamber - En el estilo de los ensayos de Joseph Addison (1672- 1719) y Richard Steele's (1672-1719), publicados en los diarios Tatler (1709-11) y The Spectator (1711-12).

Amid the general vacant …on with a loving heart- En el estilo del irlandés de nacimiento, hombre de letras, dramaturgo, poeta, novelista y ensayista Oliver Goldsmith (1728-74).

To revert  to Mr Bloom...of the Supreme Being- en el estilo de Edmund Burke (1729-97), filósofo político nacido en Irlanda que combinó en su "conservadurismo" un empirismo práctico y erudito con una veneración y una atracción hacia “la sabiduría de nuestros ancestros”.

 

En una « maravilla de la metempsicosis », Martha, la mujer con la que Bloom mantenía una correspondencia erótica secreta, se convierte en una Millicent perdida. ¿Sentimientos incestuosos de Bloom hacia su hija Millicent que podrían hacernos sospechar de los de  Joyce mismo hacia la suya, Lucia? Nadie escribe sobre esta posibilidad, que yo haya leído. Pero yo me pregunto por qué la familia Joyce ha hecho desaparecer las cartas de Lucia. ¿Para protegerla a ella, enferma mental, o el legado de su padre? Nunca lo sabremos. Da para una bonita teoría de complot.


The news was imparted…what God has joined. En el estilo del escéptico y anticlerical, filósofo histórico inglés Edward Gibbon (1737-94).

But Malachias' tale began ... Murderer's ground – En el estilo de la novela gótica de Horace Walpole's (1717-97)  The Castle of Otranto (1764). En este breve pasaje, Haines interpreta la parte de Manfred, el sanguinario usurpador de la novela de Walpole. El pasaje también es una parodia de otra novela gótica, The House by the Churchyard (1863), del escritor irlandés Joseph Sheridan Le Fanu (1814-73), así como del diálogo de las obras de teatro de Synge.

“No hay nadie ahora que sea para Leopold lo que Leopold fue para Rudolph” (padre de Bloom, quien cometió suicidio). Esa estadía en la maternidad ha tocado a Bloom en lo más profundo. Y quizás por eso haya salido de allí desesperado por sustituir a Rudy (su bebé muerto). Aparte de estas elucubraciones pseudo psicológicas mías, el pasaje está escrito en el estilo nostálgico del ensayista inglés Charles Lamb (1775-1834).

The voices blend and fuse... the forehead of Taurus - en el estilo del escritor romántico inglés Thomas De Quincey (1785-1859), en particular, de la obra The English Mail Coach (1849), Parte I y Part III, "Fuga onírica fundada en el tema precedente de la muerte súbita". La fuga onírica se expande sobre visiones caleidoscópicas de la muerte y se resuelve en una nota de "amanecer dorado" y "las resurrecciones interminables del amor (de Dios)". ¡Habrá que leer este libro!

 

Francis was reminding... from the second constellation – En  el estilo de Walter Savage Landor (1775-1864). La forma particular de ensayo asociada con este autor es caracterizada por el título de una serie de volúmenes que aparecieron en los años 1824- 53, Imaginary Conversations. Dichas conversaciones se producen entre figuras de la literatura clásica, clásica y de la historia. No pretenden recrear el pasado histórico, sino usar dicho pasado para desarrollar perspectivas para contribuir con los problemas sociales, morales y literarios de la época del propio Landor.


However, as a matter of fact...ages yet to come -  En el estilo del ensayista e historiador inglés Thomas Babington Macaulay (1800-59), maestro de una historia de cierta manera impetuosa y difícil de creer. Trataba la historia con energía y verbo para hacerla menos sórdida y más razonable de lo que se la muestra en las manos de otros historiadores.

It had better be stated . . . in which it was deliv- ered – En el estilo del naturalista y anatomista comparativo inglés Thomas Henry Huxley (1825-95). Huxley es particularmente conocido por sus contribuciones a la defensa de la teoría de la evolución. Tenía una habilidad extraordinaria para exponer un escepticismo científico indisciplinado en una prosa lúcida.

Meanwhile the skill…good and faithful – En el estilo de Charles Dickens, particularmente del capítulo 53 de David Copperfield (1849-50).

There are sins or . . . silent, remote, reproachful – En el estilo del famoso inglés converso al catolicismo romano John Henry Cardinal Newman (1801-90).

The stranger still regarded... in her glad look – En el estilo de esteticista y ensayista inglés Walter Pater (1839-94), particularmente el retrato imaginario de su infancia en The Child in the House (1894).

Mark this father… the utterance of the Word -En el estilo del crítico de arte y reformista inglés John Ruskin (1819-1900).

Burke's! Outflings my lord . . . nunc est bibendum! – En el estilo del literato escocés Thomas Carlyle (1795-1881).

 

All off for a buster…Just you try it on (hasta el final del episodio). El estilo se desintegra en fragmentos de dialectos y jergas (incluyendo retórica de predicador revivida). Joyce lo describió como “una mezcla temible de inglés macarrónico, el inglés de las personas de color, jerga  cockney , irlandés, argot de Bowery y coplas rotas”(Cartas 1:138-39, 13 de marzo de 1920).

A esta mezcla de dialectos y jergas se mezclan latinajos, latinismos, citas bíblicas, muchas expresiones en francés (idioma que Joyce dominaba a la perfección) e incluso un Caramba por ahí.

 

Notas finales desordenadas :

 

Bonita metáfora para el coito : « la mujer deja entrar al gato en el saco »

 

Los manuscritos más antiguos de traducciones inglesas del francés original datan del comienzo del S XV (Gifford).


Esta escena de Bloom visitando al niño es una parodia del nacimiento aquel de Belén :

“the vigilant watch of shepherds and of angels about a crib in Bethlehem of Juda long ago.”


El desdoblamiento de Bloom en el E15 comienza en ese momento del E14 en el que conviven el Leopold actual y el joven, «a mirror within a mirror», espejo en espejo. Fíjense en el detalle nada nimio de que la pantera negra con la que soñaba Haines en el episodio 1, que lo hizo disparar al despertarse, es el fantasma de su propio padre.

 

 

 

 

 

 

 


lunes, 29 de enero de 2024

Colin McCabe: Una introducción a Finnegans Wake

Traducción de algunos fragmentos del ensayo de Colin McCabe: Una introducción a Finnegans Wake. Del libro: James Joyce's Finnegans Wake: A Casebook.




En el Finnegans Wake, Joyce intentó escribir un libro que englobara toda la historia y el conocimiento como tema y el funcionamiento de la mente soñadora como forma.  Si uno abre una página al azar, puede encontrar referencias a temas tan dispares como la química, la mitología irlandesa, la filosofía, la historia americana, detalles de la vida de Joyce, todos entretejidos en un lenguaje que constantemente crea nuevas palabras fusionando y acortando palabras ya existentes en inglés o tomando prestadas de entre los muchos idiomas europeos que Joyce conocía.  El resultado de esta deformación del lenguaje es que cada palabra contiene más de un significado y cada oración se abre a una infinidad de interpretaciones.  Joyce le explicó su método a un amigo: “Al escribir la noche, realmente no podía, sentía que no podía, usar palabras en sus conexiones ordinarias.  Usadas de esa manera no expresan cómo son las cosas en la noche, en las diferentes etapas: consciente, luego semiconsciente, luego inconsciente.” A la dificultad del lenguaje se suma la dificultad de adivinar qué historia está contando este extraordinario lenguaje.  Las figuras cambian de nombre y se transforman en sus contrarios, aparecen y desaparecen sin ninguna racionalidad evidente.  La afirmación de Joyce sobre su método era que permitía la articulación de áreas de experiencia que estaban excluidas del lenguaje y trama convencionales.  Le dijo a la señorita Weaver: "Una gran parte de la existencia humana transcurre en un estado que no puede explicarse usando el lenguaje de la mente despierta, una gramática sencilla y una trama linear".


(…)

La importancia de la oposición entre el lenguaje invisible de la historia y el lenguaje material del deseo es evidente a lo largo de Finnegans Wake, pero es hacia el final, cuando Anna Livia, madre y río, fluye hacia su muerte cuando se presenta en una de sus  formas más simples.  Mientras Anna recuerda su vida pasada, recuerda cuánto deseaba su marido (la omnipresente figura indicada por las letras HCE) una hija, esperando tener una mujer en la familia que creyera en sus historias, que le diera el respeto que siente que le corresponde.  Pero el padre se siente inevitablemente decepcionado porque la madre le enseña a su hija que tras las historias y las identidades de HCE se encuentra el mundo de las letras y el deseo.  Mientras el padre le cuenta historias al hijo, la madre le enseña el alfabeto a la hija: “Si le contabas a él tus historias sobre las olas de la barca, yo le deletreaba a ella mis anhelos mientras le daba pastel casero” (FW 620).  Los relatos (historias) del padre son desplazados por los anhelos (deseos) de la madre;  contar da paso a deletrear.  Es esta lucha entre significado y sonido, entre historia y lenguaje, entre hombre y mujer lo que representa Finnegans Wake, introduciendo al lector a un mundo en el que su propio lenguaje puede revelar repentinamente nuevos deseos bajo viejos significados a medida que el material del lenguaje se forma  y reforma.  Si el lenguaje intenta investigar los procesos mediante los cuales somos construidos en el mundo de los sentidos y la sintaxis, las historias que reconstruimos a partir del mosaico del Wake nos devuelven constantemente al lugar de esa construcción: la familia.  A medida que el texto arroja referencias a las religiones y filosofías del mundo, a la geografía y la astronomía, volvemos una y otra vez al más banal y local de todos los problemas.  ¿Cuál es la naturaleza del oscuro delito sexual del que se acusa al padre, HCE?  ¿Es culpable?  Sólo la madre Anna Livia Plurabelle, ALP, parece conocer las respuestas definitivas a estas preguntas.  La madre ha escrito o escribirá (los tiempos se vuelven intercambiables en el mundo intemporal del Wake) una carta que lo explicará todo, pero la carta es difícil de identificar y descifrar.  Se la dictó a uno de sus hijos, Shem, un escritor de mala reputación, que probablemente alteró el contenido, y pudo haber sido entregada por su otro hijo, Shaun, hombre de éxito mundano nauseabundo.  Los dos hermanos están inmersos en un conflicto constante, a menudo ocasionado por rivalidades sexuales.  De alguna manera oscura, su hermana Issy puede tener la solución a los problemas de su padre y sus hermanos, pero se niega a decir nada serio porque se contenta con mirarse interminablemente en el espejo.

Si el lenguaje, la familia y la sexualidad constituyen tres de los énfasis del último trabajo de Joyce, hay un cuarto que es igualmente importante: la  muerte.  De hecho, el título del libro, Finnegans Wake,lo deja claro.  La referencia inmediata es a una canción de título casi idéntico (sólo un apóstrofe las diferencia): Finnegan's Wake.  Cuenta la historia de un albañil irlandés que fue a trabajar una mañana con una terrible resaca y, a consecuencia de ello, se cayó de la escalera.  Sus amigos suponen que está muerto y lo llevan a casa para “despertarlo”, es decir, para pasar la noche anterior al funeral bebiendo junto al cadáver.  Durante el velorio estalla una pelea y una botella de whisky se rompe junto a la cabeza de Tim.  Tan pronto como le entra un poco de whisky en la boca, se anima y se une a la diversión de su propio funeral (que se convierte así en un “funferal” [FW 120]).  La ambigüedad del “velatorio” del título de Joyce, que se refiere tanto a una parte del proceso funerario (el velorio de Finnegan) como al despertar general de todos los Finnegan (el velorio de Finnegan sin apóstrofe), e indica la inseparabilidad de la vida y la muerte en el  mundo del lenguaje.  Venir a la vida, aislar la existencia propia, es también aceptar la posibilidad de su terminación, de su fin.  Finnegans Wake no solo hace juegos de palabras con dos significados de "despertar", sino que la primera palabra contiene un final ("fin" en francés significa "fin") y un nuevo comienzo ("egan" nos dice que todo comenzará "de nuevo").  Y este proceso será la negación (negans) de los procesos ordinarios del lenguaje, una atención a la huella (“estela” en su tercer sentido) dejada por el paso del lenguaje.  La claridad de la comunicación se verá perturbada por la huella material de la carta que toda comunicación deja a su paso.  Muerte y sexualidad, la construcción del lenguaje dentro del drama familiar, el texto de Joyce no es un capricho autoindulgente sino un compromiso con la materia misma de nuestro ser.  En su intento de romper con las “evidencias” de la narrativa convencional con su causalidad y temporalidad fijas, dos pensadores italianos, Giordano Bruno y Giambattista Vico, fueron de profunda importancia en los escritos de Finnegans Wake.  Para comprender la importancia de estas figuras no basta con esbozar los rasgos positivos de su pensamiento, también hay que comprender qué evita Joyce al utilizar a estos teóricos, qué presuposiciones niega.

(…)

El mismo plan de Finnegans Wake, con sus tres largos libros y uno corto final, da testimonio de la importancia de Vico.  No son sólo las teorías históricas de Vico las que figuran en el Wake, sino que también juega mucho con su relato del nacimiento del lenguaje y la civilización.  Según Vico, el hombre primitivo, sorprendido en el acto sexual por un trueno, siente miedo y culpa ante lo que imagina es la voz enojada de Dios.  Se retira a una cueva para ocultar sus actividades y es este acto el que inaugura la civilización.  El lenguaje surge cuando el hombre intenta reproducir el sonido del trueno con sus propios órganos vocales.  Una vez más, sin embargo, sería erróneo entender el uso que Joyce hace de Vico como la ilustración artística de tesis filosóficas.  Lo que ofrece la teoría de Vico es a la vez una articulación inicial del lenguaje, la sexualidad y la sociedad y, más importante aún, una teoría para oponerse a las explicaciones historicistas dominantes de la historia.  El historicismo entiende el proceso histórico como subordinado a un principio dominante, que sólo puede entenderse en términos del “fin” hacia el que avanza.  Cuando Stephen Dedalus y el señor Deasy discuten la historia en el segundo capítulo de Ulises, el señor Deasy afirma que “Toda la historia avanza hacia una gran meta, la manifestación de Dios” (U 40).  Este historicismo impone al individuo un significado en el que él mismo  ya está definido.  Stephen rechaza tal significado e identidad cuando afirma que Dios es simplemente un ruido en la calle, el sonido indiferenciado a partir del cual fabricamos significado.  Es sumergiéndonos en este sonido que podemos deshacer los significados que se nos imponen y despertar de la pesadilla de la historia al sueño del lenguaje.  Al insistir en la repetibilidad infinita de cualquier momento, al rechazar una progresión hacia la historia, se pueden rechazar las identidades ya hechas que se nos ofrecen para investigar la realidad de los procesos que nos construyen.  Al negar el fin de la historia, podemos participar en las infinitas variedades del presente.  Bruno y Vico se utilizan en Finnegans Wake para ayudar a la deconstrucción de la identidad en diferencia y para reemplazar el progreso con la repetición.  Pero si Joyce utilizó a estos pensadores fue en gran medida para desplazar las concepciones dominantes de la novela cotidiana de identidad y temporalidad y no porque contengan alguna verdad intrínseca.

El texto

Intentar resumir los acontecimientos de Finnegans Wake es al mismo tiempo necesario y engañoso.  Necesario porque hay hilos de narrativa que podemos seguir a lo largo del texto, engañoso porque tales narrativas siempre están dispersas en otras narrativas.  Los seis primeros capítulos nos llevan a través de una sinopsis de todos los temas del libro (capítulo 1) y luego a través de una serie de relatos del oscuro e innombrable crimen de HCE y su juicio (capítulos 2 a 4).  La carta, que es tan crucial para comprender todas las cuestiones en juego, se analiza en el capítulo 5. El capítulo 6 se compone de una serie de preguntas y respuestas sobre los personajes discutidos en la carta y termina con una pregunta sobre Sem.  Todo el capítulo 7 está dedicado a Sem el escritor y al final de este capítulo da paso a su madre, Ana Livia, cuya vida y actividades se analizan en el capítulo 8.

El libro 2 traslada la escena de toda la ciudad de Dublín a una taberna particular en Chapelizod, uno de los suburbios de Dublín.  En el capítulo 1 los niños juegan fuera del pub y en el capítulo 2 los han acostado en una de las habitaciones situadas encima del bar donde imparten sus clases nocturnas, lecciones en las que se entremezclan materias académicas con el descubrimiento de la sexualidad.  El capítulo 3 tiene lugar en el bar sobre el que duermen los niños.  Los clientes y el tabernero (HCE) chismean toda la noche y cuando todos se han ido, el posadero se queda dormido en el suelo en un estupor de borrachera y sueña con la historia de Tristram e Iseult, este sueño constituye el tema principal del capítulo 4. 

El libro 3 encuentra al posadero dormido en la cama y los capítulos 1 a 3 tratan de Shaun en sus diversas manifestaciones como hombre de mundo.  Al final del capítulo 3 Shaun se disuelve en las voces de otros personajes y en el capítulo 4 el padre y la madre, despertados por el llanto de uno de los niños, hacen un amor bastante insatisfactorio al amanecer.  

El libro 4 ve la llegada del amanecer y el comienzo de un nuevo ciclo.  La madre Anna Livia ahora es mayor y recuerda su vida pasada antes de disolverse en el mar de la muerte, lo que inicia el ciclo nuevamente.




Capítulo 1 (I.1) del Finnegans Wake según la guía de trabajo de Bernard Benstock


CAPÍTULO 1 (págs. 3-29)


3: Declaración de temas.


Batalla en el cielo y presentación de Finnegan.


5: La caída de Finnegan y la promesa de resurrección.


5-6: La ciudad. 


6-7: El entierro (o la estela).


7-8: El paisaje presagia a H.C.E y A.L.P. (Este punto me recuerda que en una conferencia de Bloomsday Montreal, como respuesta a una pregunta que le hice, John McCourt me dijo que en el Finnegans Wake el paisaje es otro personaje).


8-10: Visita al museo Willingdone. 


10. La casa Earwicker. 


10-12: Biddy la gallina encuentra la carta en un montón de basura.


12-13: Paisaje de Dublín.


13 15: Prehistoria de Irlanda: los invasores (incluído el nacimiento de Shem y Shaun, p. 14).


15-18. Mutt y Jute cuentan la batalla de Clontarf.


18-20. El desarrollo del Alfabeto y los Números.    


21-23. La historia de Jarl van Hoother y el bromista (o la reina pirata, personaje histórico).


23-24. La caída. 


25. El despertar de Finnegan revisitado.


25-29. Al inquieto Finnegan se le habla de la época actual.


29. Introducción de H.C.E.